miércoles, 5 de diciembre de 2007

El SIDA y las prácticas de riesgo



Los últimos datos de la ONU alertan que siete de cada diez enfermos del SIDA viven en Africa. Pero que también ha crecido el número de los mismos en Asia y Europa Oriental.

También hay enfermos de este tipo en los países del Norte, en los desarrollados. Lo que pasa es que los sistemas de prevención y de información funcionan mejor que en los del Sur, y eso ha hecho posible que el aumento no haya sido tan notable.

Recientemente he leído una encuesta hecha a estudiantes españoles de los cuales el 40% afirma que no utiliza preservativos en sus relaciones sexuales, tampoco en las esporádicas de aquí te pillo, aquí te mato. Y el dato es preocupante. Por lo menos a mí me deja estupefacto. Porque ya no estamos en el tiempo anterior donde se hablaba de que esta enfermedad se contraía solamente en el mundo homosexual o en aquellos que estaban enchufados a la heroína. Hoy el riesgo ha aumentado en dosis notables a todas las categorías de los humanos. Y así más que hablar de grupos de riesgo hay que hacerlo de prácticas de riesgo. Y esto sí que está al alcance de todos.

Hoy por hoy el preservativo sigue siendo el medio universal de preservarnos de estas prácticas de riesgo que pueden conducirnos a una enfermedad que ya suma millones de personas en el mundo entero. Es necesario controlar el virus. Y por tanto eliminar de nuestro haber las prácticas de riesgo. El papel de los medios de comunicación y de la escuela se me antoja supernecesario todavía en estas tareas de información y prevención, pues se habla de más de 25.000 infectados el último año en Europa. Mientras hay que exigir y potenciar los medios para que los científicos sigan trabajando en la famosa vacuna tan necesaria, y que cuando llegue, que llegue sobre todo a los países mas pobres, a todos, pero no dejando para más tarde a los que menos acceso tienen a los bienes de este mundo


1 comentario:

Jónathan Gil Guerrero dijo...

Los datos son sangrantes. En primer lugar la cuestión de los países menos desarrollados y en segundo lugar que el 40% de los españoles no utilicen el preservativo.