lunes, 30 de abril de 2007

¿Día del Trabajo o del Trabajador?



El Primero de Mayo, como todos sabemos, nace de la lucha de unos trabajadores reivindicando sus derechos. Ahí dejaron su piel y su sangre.

Hoy es más un día de descanso, de fiesta que de reivindicación. Y en España un día hermoso para los arquitectos, pues al haber solo un día intermedio entre domingo y martes, los puentes se fabrican y construyen que da gusto. Los que hoy hemos venido a trabajar, nos hemos encontrado las calles vacías. La circulación es mucho más rápida.

Unos le llaman Día del Trabajador, otros Día del Trabajo. Puede que en el fondo sea más lo segundo.

Hace 37 años que estoy trabajando. Que dejé como actividad la de estudiante. Después he seguido también estudiando, pero sin dejar el trabajo. En España dicen que hace falta 35 años de cotización para jubilarte. A mí de hecho me sobrarían dos. Pero el otro día descubrí que me faltan ocho todavía, y fue entonces, después de tanto tiempo cuando me dí cuenta que estuve ese tiempo trabajando sin cotizar a la Seguridad Social. Me han dicho donde puedo reclamar. Pero tendré que pagar lo que no pagué en ese tiempo o lo que no pagaron por mí.

La mayor parte de ese tiempo he trabajado más de ocho horas diarias. Dedicado con pasión, salvo etapas concretas y muy pequeñas que no estaba muy a gusto, a los trabajos que hacía. Me gustaba a lo que me dedicaba y eso me ilusionaba. No me importaba dedicarle horas. Seguramente hoy me lo plantearía de otra forma.

Porque cuando ya, cansado de tantos años de trabajo, me dicen que me faltan aún ocho, y que la tendencia general es aumentar los años después de los 65 legales, me da hastío y el cansancio se me acumula. Y ¿cuándo va uno a disponer de horas libres para hacer lo que a uno se le apetezca en cada momento? Si la jubilación es para estar jubiloso, ¿voy a disfrutarla cuando se apodere de mí la enfermedad o no pueda caminar?

Por eso digo que casi más Día del Trabajo que Día del Trabajador. Nos hemos seguido acomodando a tantas cosas, que se nos ha perdido el espíritu revolucionario, transgresor y rebelde que todo ser humano debe llevar dentro de sí para seguir conservando la dignidad y la libertad, eso que nos hace iguales a todos.

domingo, 29 de abril de 2007

De políticos y las próximas elecciones





Sección llamada “El pulso ciudadano”. Todos los días una pregunta a seis personas. En el periódico de mi localidad. La de hoy era: “¿Habrá un cambio positivo con las elecciones?” (para los que no sean de España, por aquí tendremos el 27 mayo elecciones a los parlamentos autonómicos y a los ayuntamientos).

De las seis personas uno es ingeniero, otro trabaja en la hostelería, dos son amas de casa y otras dos trabajan en el sector de servicios. Cuatro de ellos dice que no, que no habrá cambio. Que todo seguirá igual.

¿Razones? “No confío en los políticos. Dicen un montón de farfulladas durante la campaña y luego no se acuerdan”. “La palabra preferida de los políticos es promesa, pero cuando se dan la vuelta ya se olvidan”. “Pienso que si hay un cambio todo seguirá igual de mal o peor. Los políticos no me inspiran confianza”. “Las elecciones sólo sirven para las promesas. Cuando llegan al poder se olvidan del ciudadano”.

¿Es esto verdad? Cierto que no se puede generalizar. Y todos, yo entre ellos, conocemos políticos honestos, serios, cumplidores, que trabajan, que intentan materializar un alto porcentaje de sus promesas electorales.

Pero no nos queda más remedio que aceptar un hecho: se está extendiendo un mal ambiente en torno a las acciones de los políticos. Para colmo, el mismo periódico, como todos los de la provincia, dedican un par de páginas y mas a poner de manifiesto la lectura del sumario contra la corrupción de una serie de políticos en la ciudad de Telde de Gran Canaria, a través del cual se ve como algunos de ellos manejaban billetes de 500 euros, como quien maneja céntimos ,para mil y una operaciones: desde comprarse varias casas a nombre de cada uno de los miembros de la familia hasta coches lujosos pasando por plazas de garaje y no sé cuántos viajes a sitios de placer turístico.

Que por unos pocos no pueden pagar todos, es verdad. Pero estos últimos, los de los billetes de 500, se presentan a las próximas elecciones con otras siglas que ellos se han inventado. Y van tan frescos y sonrientes cuando alguien con cámara se les acerca a grabarles. ¡Menuda jeta¡ A estas cosas hay que ponerles remedio pronto, porque no solo pagan los políticos honestos, los que pagamos somos los ciudadanos que vemos cómo nuestros dineros se van a otros sitios, que no vemos cómo se invierte en nuestros barrios y que nos vamos cansando de elegir a gente así y, en el peor de nuestros fallos, nos quedamos en casa para que salgan los que siempre han salido.


sábado, 28 de abril de 2007

El cumpleaños de mi amigo




Un amigo mío cumple hoy sesenta años. Hemos estado conversando un rato. Tiene claro que lo importante de su edad es la vida que ha vivido, con intensidad, con errores y con aciertos. Que siempre ha intentado ser coherente con sus pensamientos, su filosofía de la vida, sus sentires. Que ha tenido fallos, sí, pero que todo ello es también la salsa de la vida, pues en bastantes ocasiones ha sabido reconocerlos y rectificarlos.

Me cuenta que se siente con ánimo y con ilusión, que la vida está por vivir, que la edad al fin de cuentas es solo una abstracción, un número, unas meras matemáticas. Pero que la edad fundamental está en el corazón, en las ganas de vivir.

Y hablando de todo ello me saca el tema de que se asombra al conocer a muchos jóvenes que considera más viejos que el mismo, que los ve como cerrados a la vida, con ideas un tanto fascistas, pensando en si mismo y no en lo que les rodea. Que le sorprende ver a gente joven con análisis de derechas, con maneras de pensar tan machistas.

En la conversación recordamos muchas cosas de antes. Y me decía que ni por asomo pensaba cuando era adolescente que la vida le fuera a deparar situaciones y acontecimientos tan diversos. Y que si de algo estaba orgulloso era de haber estado siempre disponible para el viaje, para el cambio, para no estar anclado en ningún puerto de opiniones, ideas o creencias. Que siempre ha estado contra el fanatismo, y que hoy lo considera no solo cada día más absurdo sino también muy peligroso, como uno de los peligros más fuertes de nuestra sociedad.

Y también me dice que la edad cambia un poco a las personas. Se siente ágil, sí. Con ilusiones, sí. Pero también con miedos. Le preocupa que los que quiere se queden solos.

Y que no está seguro de casi nada. Que tiene pocas certezas. Que la verdad se va encontrando poco a poco, y que cuando ya parece que la tienes, hay otra perspectiva que se te asoma delante y te abre nuevos mundos.

Que ha intentado ayudar a otros, pero que en muchas ocasiones no se ha sentido correspondido. No busca privilegios, pero a veces ha lanzado algun SOS para los suyos, para los más cercanos y no ha tenido la correspondencia que pensaba.

Y que asimismo se ha llevado muchas decepciones de personas que consideraba sus amigos. Al final, más tarde o más temprano, los amigos se cuentan con pocos números, pues muchos que así lo parecen lo son más de la función que desempeñaba en momentos determinados que de su propia persona. Pero que justo la edad pone las cosas en su sitio, y te hace redescubrir los amigos que siempre han sido, aunque en momentos largos no tengas contacto con ellos.

Hemos hablado mucho. Pero bastante. Se confiesa, y yo sé que lo es, algo transgresor de las normas. O al menos, viviendo en la frontera. Porque las normas, las leyes son para las personas y no al revés.

Sí. Hemos hablado de política. No podía faltar ese tema. Pero lo dejamos para otro momento. Me ha contado que la crispación existente en estos momentos en este país impide que la gente vea las cosas con objetividad, y que este país no se merece a algunos políticos que salen todos los días en los telediarios diciendo bastante tonterías.

Pero lo dejamos aquí. Quiero felicitar a mi amigo. Vive su edad con intensidad. Es consciente de ello. Desde aquí mi felicitación a todos y todas los que crecen con la vida, se abren a ella, y no se cierran en una ideología o se enclaustran en una opinión.

viernes, 27 de abril de 2007

Decepciones



Lo leí hace poco en la revista Magazine, no recuerdo de qué día. Una entrevista a Ana María Matute, de 80 años. Le preguntaban sobre qué le decepcionaba de la especie humana. Me llamó la atención su respuesta, podría ser también casi la mía. Digo casi, solamente. Así que recorté esa hoja y subrayé en rojo sus declaraciones. Las transcribo:

“Me decepciona de la especie humana constatar que no tiene solución. Basta leer un periódico o abrir la televisión para tomar conciencia de que el mundo es un horror. El último siglo ha sido terrible. Nos salva el trabajo, el sacrificio, la solidaridad de gente anónima. Gente que compensa la visión negativa que ofrecen los dirigentes que desorganizan, descuartizan el mundo. De joven, se suele ser idealista; cuando era joven, tuve esperanzas en el comunismo. No es que creyese mucho mucho, pero alguna esperanza en el sistema la tuve hasta que lo ví de cerca, hasta que lo toqué. ¡Qué gran horror!”.


Podría ser casi también mi opinión. Porque aunque sea difícil la solución, el hecho de mucha gente anónima que, de forma voluntaria, más allá de la política y de las ideologías, arriman el hombro en acciones solidarias son buenas recetas para tener algo más de esperanza. Sin descartar el análisis de la escritora, que no deja de tener razón

jueves, 26 de abril de 2007

uvapasa: "NoSoTrOs SOMOS el MaÑaNa"

uvapasa: "NoSoTrOs SOMOS el MaÑaNa"

Que la música cambie tambien el mundo



Cuando de cambiar el mundo se trata, todos miramos hacia los políticos de turno, sobre todo a los que más arriba están. Mayor poder tendrá Zapatero en España que el alcalde de mi pueblo. Mayor aún la ONU que Zapatero; bueno esto es un decir, porque en la ONU no veas las filigranas que hay que hacer, las cosas que hay que volver para atrás, para que puedan salir aprobadas al gusto de todos, sobre todo de los que más mandan, que son los que más poder tienen.

Pero si lo pensamos bien, cada uno puede aportar su granito de arena. Cada uno en su casa, con su gente, con su familia, con sus amigos, con sus vecinos. Aquella palabra, este gesto, la sonrisa determinada, el echar una mano, la opinión dada, son cosas que están ahí al alcance de la mano de cada uno de nosotros que pueden ayudar a que el otro sea diferente, y, sobre todo, a que lo sea cada uno de nosotros, poniéndonos en la piel de los demás.

Pero algo que sí puede cambiar más el mundo y a mejor, y a veces nos hemos olvidado, es la música. Yo pertenezco a una vieja generación. Aquellos que corríamos delante de la policía en tiempos de Franco. Los que vivimos con gran gozo la transición democrática. Y en aquellos momentos hubo gente como Raymon, Jarcha, Serrat, y otros más internacionales como Víctor Jara y muchos otros, cuya música y canciones nos sacaron del letargo y nos movilizaban.

Algo así patrocina también Bono con el rock. Y lo hace conscientemente. De hecho, Miguel Ríos fue uno de los que, con el rock, impuso cambios en nuestro país. La música no solo puede cambiar el aspecto de la gente, la forma de vestir o de peinarse. Puede también herir a los que están actuando mal y retorcer las mentes y hacer pensar. Y todos juntos cantando esa misma canción que impulsa al cambio, a la unidad, hace pensar a la gente mucho más que los discursos sin sentido de mucho

miércoles, 25 de abril de 2007

Las injerencias de la Iglesia




“Toda intervención de la Iglesia en la vida política es una injerencia indebida”. La Iglesia “no debe tener un ordenamiento político preferible”. El que debe “determinar libremente las formas más adecuadas de organizar la vida política es el pueblo”, son palabras pronunciadas por el obispo Blázquez, presidente de la Conferencia Episcopal Española.

Fueron dichas en la apertura de su asamblea el pasado lunes 23 de abril. Y prácticamente publicadas por todos los medios de comunicación social del país.

Personalmente, y creo que a muchos en este país también les pasaba, hace tiempo que estaba deseando escuchar algo así. No sé si todos los obispos estarán de acuerdo con estas palabras. Habrá que seguir el desarrollo de la asamblea. Ni sé si esas palabras tendrán consecuencias y acuerdos o toma de conclusiones. Porque no se puede predicar y dar trigo.

Y algo tendrán que hacer o definir los obispos en su postura con la COPE, cadena donde la Iglesia tiene la mayoría de las acciones, y que se distingue no solo por su oposición al gobierno actual, sino por sus críticas infundadas, por sus insultos, por sus tonalidades tan impropias con el sentir que debe tener una comunidad tan original, en sus relaciones con los demás, como debe ser la Iglesia.

lunes, 23 de abril de 2007

Rutinas, otra vez las de todos los dias



Es lunes, y como a todos, se me hace pesado. Rompes con la monotonía del hacer lo que tú quieres, al que tu cuerpo se ha acostumbrado en el fin de semana, y comienzas a hacer lo que ya de alguna forma te viene programado: el trabajo.

Venía en el autobús y pensaba en ello. Otra vez a trabajar, a repetir lo mismo, con algo de creatividad, pues se trata de educar. Pero con el mismo grupo de gente, con los mismos horarios, con parecidos problemas. Es la rutina de cada día. ¿Quién nos librará de ella?

Sin embargo la vida está llena de rutinas. Y demos gracias que podemos disfrutar de la rutina del trabajo de cada día, de la rutina del comer a diario, de la rutina del ejercicio y de ejercitar la memoria.

¿Qué sería de un deportista si no se sometiera a la rutina del esfuerzo del entrenamiento todos los días? En poco tiempo, su ser deportivo desaparecería.

Y no digamos nada de la rutina del amor, del beso o de los besos diarios, del quererse de la pareja, de los roces mutuos. ¡Benditas rutinas todas ellas¡

¿Y nos quejamos? Haberlos haylos, que tienen otras rutinas más fastidiosas como son tener hambre todos los días, o sufrir la guerra en todo momento o vivir bajo la intemperie cada hora o aguantarse a un dictador en muchas decisiones que afectan a su vida.

Rutinas. Rutinas. Pero menos mal que hay un lunes abierto a las rutinas que nos dan el pan nuestro de cada día. Hola, Lunes, bienvenido a mi vida.

sábado, 21 de abril de 2007

Las niñas de Tenerife




Con doce y catorce años. Vivían con su madre. El padre presentó una denuncia porque no le dejaban ver a sus hijas. La verdad es que éstas no querían ir a la casa paterna porque cuentan que el padre intentó violarlas y habían sufrido malos tratos por su parte.

Una jueza le ha quitado la custodia a la madre y se la ha dado al padre. Habrán de vivir con una tía paterna, y a la sombra de su padre.

Las imágenes de un video se han difundido por todo el espacio nacional de este país. Se observa cómo las niñas gritan, no quieren entrar en la casa de su tía. Y se ve con nitidez como el padre y la tía las empujan, las fuerzan para que entren en su casa. Anoche sábado era portada de todos los telediarios. Y aparece en cualquier periódico o revista este fin de semana.

Y la jueza sigue impasible. Además la madre no podrá ver a las niñas durante tres meses.

Siempre he pensado que si hubiera estudiado Derecho me hubiera gustado ser juez. Se me han quitado las ganas. Aparte de que ya no estoy a tiempo. Y ando a gusto con lo que hago.

Pero decidir sobre la vida de terceras personas tiene que ser un asunto bastante difícil. Máxime sobre menores de edad. Y peor todavía si decides en contra de la voluntad de las niñas. Y lo tienes aún pésimo si toda la opinión pública está en contra de tu decisión como jueza en este caso.

Pero ¿es tan difícil cambiar de opinión un juez? ¿Hay que esperar uno y más trámites burocráticos mientras las niñas están violentadas donde no quieren estar? ¿no ha visto la jueza el vídeo en cuestión con las imágenes narradas?

Nadie entiende estas decisiones. Yo tampoco.

La madre pondrá una querella contra la jueza. Espero que le respondan pronto, para que no sigamos afirmando que la justicia es ciega. En este caso peor que ciega: no quiere ver.

El limbo y el cumpleaños del Papa





Leyendo hoy el periódico me entero que la Iglesia ha decidido que el limbo es una construcción inexistente, que no existe, y que los niños que mueran sin bautizar se van al cielo.

El limbo siempre ha sido como la imagen de los que están despistados. En este caso, ¿podía ser una auto-imagen de la propia Iglesia? De todas formas, me parece positivo siempre cambiar de rumbo, y estar en la línea de buscar la verdad. De alguna manera esta declaración del Vaticano, viene a decir también “nosotros no siempre tenemos la verdad y andamos buscándola”. Espero, desde luego, que eso sea así.

Y este tema me recuerda que hace pocos días leí también que Benedicto XVI, el actual Papa, acababa de cumplir 80 años. Ya recuerdo que hace dos años cuando lo eligieron pensé sobre la marcha si no sería mayor para esa tarea. La verdad es que a veces piensa uno que elegir Papa tiene que ser bien difícil, le dan ese puesto a las personas con una edad en que los demás se jubilan.

¿No sería bueno también la jubilación para los hombres de la Iglesia? Conozco algunos que con más de 75 años siguen al frente de sus parroquias y trabajos.

Con esa edad, la que tiene el Papa y muchos otros trabajadores de la Iglesia, en activo, con responsabilidades, no solo se cierra el paso a gente más nueva, sean clérigos o laicos, sino que también se niega el propio sentido de la “jubilación” : una etapa en la vida para vivir con júbilo.

¿No le vendría bien a Ratzinger y a muchos otros con más de 65 años vivir algo más tranquilos, escribir, hacer públicas sus reflexiones vitales de miles y miles de experiencias vividas? Además hoy con esto de los blogs lo tienen, lo tenemos todos, hasta más fácil.

Pues me lo sigo pensando: Con 80 años, la edad que todos están jubilados, y llevar el timón laboral de una actividad tan intensa como es la Iglesia en todo el mundo, ¿no es pedir demasiado?; ¿no será eso seguir en el limbo que ya no existe?

viernes, 20 de abril de 2007

"Si mi hijo fuera gay"



“Si mi hijo fuera gay, yo le apoyaría sin condiciones e iría a su boda”. Fue la respuesta de Mariano Rajoy, presidente del Partido Popular, a la pregunta que le formularon en un plató de televisión en la noche de ayer. Eso sí, advirtió que primero le convencería para que formulara una unión de hecho. Pero, en todo caso, "estaría al lado de mi hijo en aquello que ello decidiera”

Ni un brote de rechazo ideológico ni sentimental ni de rictus al tema. Eso le dignifica. Y le hace ser normal. Habían algunas dudas con respecto al tema, y parece se han aclarado. Otra cosa diferente, según la misma ideología, es el matrimonio.

Porque ya es hora de que con normalidad hablemos de la homosexualidad, como libre opción de vivir la condición sexual entre los humanos. Supongo que todavía en la mente de muchas personas está la idea de la enfermedad o anormalidad de las personas homosexuales.

Es hora de erradicar estos prejuicios, como tales puesto de manifiesto por organizaciones mundiales dedicadas al tema de la salud. Es hora de que nadie censure el que cualquier persona viva como mejor le parezca, sea hetero, homo o lo que fuese. Sin que tampoco nadie se siente obligado ni a declararse como tal ni a casarse. Son las opciones de la libertad humana.

jueves, 19 de abril de 2007

Pensando en voz alta

Este blog es un deseo de expresar en voz alta lo que uno siente y opina tanto de cosas que ocurren en mi interior como en mi exterior, sea el que fuese y sea el momento personal en que me encuentre.

Con total libertad interior, pero también dando esa libertad a quien quiera no solo hacer comentarios sino también expresar sus opiniones de manera más pública y más manifiesta. Eso sí, con una norma para mí y para cualquiera que quiera enviar sus reflexiones: el respeto a las personas. A mí me han enseñado que mis derechos terminan donde empiezan los de los demás. Es decir, que no solo tengo derechos, sino también deberes.

Normalmente será la opinión personal sobre hechos o situaciones de cualquier índole –personal, ambiental, social, cultural, nacional, internacional, espiritual-, pero también abierto para colgar opiniones de otros blogs, reflexiones o poemas y un largo etcétera. Comienzo con solo pocas etiquetas: comentarios desde el interior, comentarios sobre cosas exteriores, textos, testimonios, poemas… Ya se irá viendo. Abierto a la vida, como la vida venga.

Saludos para todos y todas los que me puedan leer