Tarde de movimientos inertes... de silenciosos estruendos... de sentimientos paralizados y congelados hasta que tu calor los derrita... tarde que se hace noche y todavía no anuncia el amanecer del mañana en que te pueda ver... esperas que desesperan... amor que estalla y se contiene en la conveniencia de mitigar el dolor... suspiros que cortan el aire, que roban el poco que hay dentro... sed que no se calma ni con aguas del más puro manantial... extremos deseos, excesos de sueños e ilusiones que se postergan en un mañana incierto... insípida saliva que ha perdido fuerza, que se desperdicia al no tener tu boca... realidades confusas... confusiones claras... presentes convenientes... mañanas impensables... pensables mañanas... canciones sordas si mi voz no puede cantarte al oído... dulce chocolate amargo... samsara evocando en mi nariz por veinte años, perfumando mi alma que guarda su aroma... regalos que ocurren cada cien años luz... luz que ilumina mis cien años de soledad... soledad que se vuelve inspiración de García Márquez... imitación del Maestro sin lograrlo... frases entre puntos suspensivos... suspendido mi corazón a tal punto... punto que punza en la herida... herida de compartirte... hemorragia que no para... remedio sin cura... cura sin instantáneo remedio... costras que caen y sangran otra vez... llagas que cicatrizan... piel que renace... día que se apaga... noche que salva...
Tere García Ahued.
Tere García Ahued.
2 comentarios:
Que cierto es.. cuando dices.. insoñables mañanas... pero que lindo es cuando ese mañana que veíamos tan lejos.. de pronto llega.. y entonces nos damos cuenta.. que esa herida que nos lastimó tanto.. nos hizo crecer mucho...
un abrazo..
Oruguita27@yahoo.es
Gracias Oruguita27 por tu comentario. Y no hay nada más hermoso supongo, que ver realizados los sueños que un día tejimos en nuestra mente, aún sin saber si ocurrirían. Es verdad que al menos nos dejó una experiencia de crecimiento.
Gracias por leernos.
Tere García.
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