lunes, 31 de marzo de 2008

¿Dónde está la paz?


El hombre busca la paz y no la encuentra

Atraviesa montañas y llanuras,
eleva su vuelo surcando espacios,
cruza mares inmensos y la paz no está allí.

La busca en el silencio de la noche.
en la quietud de los campos,
en el perfume de las flores,
en el canto de las aves,
en el murmullo del agua
y allí tampoco está la paz.

¿Dónde está la paz prosa obligada de poetas,
letra de escritores,
jaculatoria y plegaria,
música y canto.?

¿Estará escondida detrás de alguna ruina
para permanecer en el tiempo y el espacio?.

Ahora el hombre construye edificios
donde fuertes rejas lo protejan
y allí quiere encontrar la paz,
pero la paz no entra allí.

Abre caminos, calles y carreteras
por donde cada día sale en busca de esa paz
y regresa solo y confundido,
en ningún lugar pudo encontrar la paz.

Pero un día reflexiona,
mira dentro de sí
y allí serena y tranquila está LA PAZ,
que tanto ha buscado
y junto a ella el amor
a tolerancia, la fraternidad, la armonía y la tranquilidad.

Esa paz que el hombre encontró,
hace que los pueblos se toleren
y que el mundo marche al ritmo de la hermandad y la unión.

Entonces los edificios se vuelven hogares,
que son santuarios de paz y de amor.
Por los caminos van hombres de paz,
por las calles se saludan con un abrazo de paz
y van por las carreteras llevando el canto de la paz.

Si cada hombre buscara dentro de sí su propia paz
se acabarían las guerras,
se escucharía al hermano,
se comprendería al vecino
y daríamos la mano al forastero.

Así veríamos al sol brillar con más intensidad
porque la paz también tiene luz propia.

Nelly Guerrero

sábado, 29 de marzo de 2008

Jesús y la política



Jesús y la política

Jesús nació, vivió y murió en un país dominado y explotado por una potencia extranjera, el Imperio Romano. En vida de Jesús, por las calles de Jerusalén se paseaban los legionarios romanos que imponían su ley con brutal contundencia. Además, Roma abrumaba a los habitantes de Palestina con impuestos calculados caprichosamente, siempre en detrimento de los pobres. Los recaudadores de tales impuestos eran los publicanos, que aumentaban la presión fiscal en beneficio propio, o sea, robaban a los pobres. Y además eran colaboracionistas con el Imperio opresor. Si Jesús predicaba la justicia y la liberación contra opresiones y esclavitudes ¿cómo se explica su silencio ante la opresión más dura que sufría su pueblo?

Jesús no fue un cobarde. Ni pretendió ingenuamente enseñar una religión que "no se mete en política". Lo que ocurre es que Jesús vio claramente que lo único que cambia de verdad la política es la renovación interior de las personas. La pena es que no creemos en esto. Sin embargo, si algo dejó claro el movimiento de Jesús es que un pequeño grupo de personas, que se renuevan de verdad interiormente, transforman un Imperio.

Todos queremos renovar a los gobernantes. Lo que nadie quiere es renovarse a si mismo. En esto está la clave del silencio do Jesús ante el poder opresor de los romanos. Por eso, cuando a Jesús le dicen que Pilatos había asesinado a unos pobres galileos, Jesús no dice que había que expulsar a los romanos, sino que lo que Dios quiere es que cada cual se convierta. Además Jesús admitió, en el grupo de sus discípulos más cercanos, lo mismo a publicanos que colaboraban con los romanos que a quienes luchaban contra ellos, un zelota (Simón) y un sicario (Judas). Más aún, Jesús juzgó positivamente a cargos importantes de las tropas extranjeras.


Y es que Jesús llegó lo más lejos posible en la renuncia al afán de dominar a los demás. G. Theyssen, el especialista que seguramente ha estudiado mejor este asunto, indica cómo, en el Sermón del Monte, descubrimos no sólo la invitación a refrenar la agresividad hacia los otros, sino también a soportar su agresividad. Jesús, en efecto, formula esta exhortación paradójica: "Si uno te abofetea en la mejifia derecha, ponle también la otra". Es una invitación clásica a la auto-estigmatización, es decir, a abrazar abierta y libremente una posición inferior que atrae y soporta la agresión de los demás. Solamente de ese modo, el otro no quedará reforzado en su obrar, sino que quedará desarmado, sin argumentos y, por eso, se sentirá inseguro.

Después de la reciente campaña electoral, ha quedado patente que los obispos españoles han tomado una postura que nada tiene que ver con la postura que adoptó Jesús, en ese orden de cosas. Primero, porque lo más claro en la postura de los obispos ha sido su opción política, mientras que en Jesús lo más claro fue su opción religiosa. Segundo, porque los obispos han asumido una opción claramente conservadora, mientras que Jesús tomó una decisión provocativamente renovadora.

Quiero decir: si por algo se habla hoy en España de los obispos, es por su opción política, en tanto que, si por algo se hablaba en Palestina de Jesús, fue por su opción religiosa.
José M CastilloBilbao- Fuente: Diario DEIA » DIRECCIÓN: Cartas al Director.

viernes, 28 de marzo de 2008

Todos somos espejo



Todos somos extensiones del campo universal de energía, distintos puntos de vista de una única entidad. Esto implica ver todas las cosas del mundo, a todas las personas del mundo, y darnos cuenta de que estamos mirando otra versión de nosotros mismos. Tú y yo somos lo mismo. Todo es lo mismo. Todos somos espejos de los demás y debemos aprender a vernos en el reflejo de las demás personas. A esto se llama espejo de las relaciones. A través del espejo de una relación, descubro mi yo no circunscrito. Por esta razón, el desarrollo de las relaciones es la actividad más importante de mi vida. Todo lo que veo a mi alrededor es una expresión de mí mismo.
Las relaciones son una herramienta para la evolución espiritual cuya meta última es la unidad en la conciencia. Todos somos inevitablemente parte de la misma conciencia universal, pero los verdaderos avances tienen lugar cuando empezamos a reconocer esa conexión en nuestra vida cotidiana.
Las relaciones son una de las maneras más efectivas para alcanzar la unidad en la conciencia, porque siempre estamos envueltos en relaciones. Piensa en la red de relaciones que mantienes: padres, hijos, amigos, compañeros de trabajo, relaciones amorosas. Todas son, en esencia, experiencias espirituales. Cuando estás enamorado, romántica y profundamente enamorado, tienes una sensación de intemporalidad. En ese momento, estás en paz con la incertidumbre. Te sientes de maravilla, pero vulnerable; sientes cercanía pero también desprotección. Estás transformándote, cambiando, pero sin miedo. Te sientes maravillado.
A través del espejo de las relaciones, de cada una de ellas, descubrimos estados prolongados de conciencia. Tanto aquellos a quienes amamos como aquellos por quienes sentimos rechazo, son espejos de nosotros. ¿Hacia quiénes nos sentimos atraídos? Hacia las personas que tienen características similares a las nuestras, pero eso no es todo. Queremos estar en su compañía porque subconscientemente sentimos que al hacerlo, nosotros podemos manifestar más de esas características. Del mismo modo, sentimos rechazo hacia las personas que nos reflejan las características que negamos en nosotros. Si sientes una fuerte reacción negativa hacia alguien, puedes estar seguro de que tú y esa persona tienen características en común, características que no estás dispuesto a aceptar. Si las aceptaras, no te molestarían.
Cuando reconocemos que podemos vernos en los demás, cada relación se convierte en una herramienta para evolución de nuestra conciencia. Gracias a esta evolución experimentamos estados extendidos de conciencia.
La próxima vez que te sientas atraído por alguien, pregúntate qué te atrajo. ¿Su belleza, gracia, elegancia, autoridad, poder o inteligencia? Cualquier cosa que haya sido, sé consciente de que esa característica también florece en ti. Si prestas atención a esos sentimientos podrás iniciar el proceso de convertirte en ti más plenamente.
Lo mismo se aplica a las personas hacia las que sientes rechazo. Al adoptar más plenamente tu verdadero yo, debes comprender y aceptar tus características menos atractivas. La naturaleza esencial del Universo es la coexistencia de valores opuestos. No puedes ser valeroso si no tienes a un cobarde en tu interior; no puedes ser generoso si no tienes a un tacaño; no puedes ser virtuoso si no tienes la capacidad para actuar con maldad.
Gastamos gran parte de nuestras vidas negando este lado oscuro y terminamos proyectando esas características oscuras en quienes nos rodean.. Las personas más esclarecidas del mundo aceptan todo su potencial de luz y oscuridad. Cuando estás con alguien que reconoce y aprueba sus rasgos negativos, nunca te sientes juzgado. Esto sólo ocurre cuando las personas ven el bien y el mal, lo correcto y lo incorrecto, como características externas.
Cuando estamos dispuestos a aceptar los lados luminoso y oscuro de nuestro ser, podemos empezar a curarnos y a curar nuestras relaciones. Todos somos multidimensionales, omnidimensionales. Todo lo que existe en algún lugar del mundo también existe en nosotros. Cuando aceptamos esos distintos aspectos de nuestro ser, reconocemos nuestra conexión con la conciencia universal y expandimos nuestra conciencia personal.
Una vez que puedas verte en los demás, será mucho más fácil establecer contacto con ellos y, a través de esa conexión, descubrir la conciencia de la unidad. Éste es el poder del espejo de las relaciones.

DEEPAK CHOPRA

miércoles, 26 de marzo de 2008

Calidad de vida en los pequeños pueblos





Calidad de vida en la sencillez de los pequeños pueblos.

A través de montañas bajas y árido paisaje, llegamos a un pequeño pueblo mexicano del interior. Por el angosto camino pueden verse las franjas de agaves que concentran energía que nunca destilará en tequila. Les acompañan nopales y cactus que resguardan entre sus espinas la poca humedad que les permite sobrevivir y que acogen el polvo que los autos y caballos levantan a su paso.

Inmerso en este rincón, llegamos hasta el hotel, una antigua hacienda del siglo XVII, restaurada para ofrecer con sus pocas habitaciones, todo un paraíso de posibilidades de descanso y reflexión. Basta cruzar el umbral de la pesada puerta de madera y nos recibe un precioso patio interior, con pozo y fuente, rodeados de arcos y portales que muestran el esplendor de una época en la historia.

De noche la naturaleza nos regala ecos de cantos de insectos, una quietud y esos cielos tan negros en que a diferencia de las ciudades luminosas y contaminadas, podemos ver tantas estrellas como no sabíamos que existían. El ambiente invita a sentarse en una mecedora y al cadencioso sonido de la madera curvada, nos movemos ritmicamente para perder la mirada e imaginar leyendas e historias antiguas.

Viajan desde la cocina, los deliciosos aromas de la cena casera que pondrán en nuestra mesa, no hace falta mostrarnos variado menú porque las tres opciones son tan buenas que nadie puede rechazar, y es en esa concentración sensorial, que recibimos de quien prepara las viandas, una energía positiva que imprime en la comida que llega a nuestro estómago, aprobando la teoría de la transmisión de estados de ánimo de esta manera.

Son las diez de la noche y los pueblerinos que vuelven a sus casas, se saludan unos con otros porque todos se conocen, no se cuidan las espaldas porque son todos buenos y nobles, y en esta pureza de corazón es que la codicia o maldad no les alcanza todavía. Apenas si hay servicios de luz y teléfono, lo más moderno y tecnológico es aquel vecino fotógrafo que a puerta abierta mantiene todo el día música sonando con tal volumen que llega hasta el kiosco y resto del lugar. En la única tienda del pueblo encontramos las marcas de productos de la ciudad al lado de las canastas de pan casero, esponjoso y aromático que no tiene competencia con los bollos empacados en bolsas con fechas de caducidad.

Amanece y los gallos cantan, la Iglesia hace sonar sus campanas anunciando la celebración del Domingo de Ramos. Perfecta oportunidad para conocer de qué manera viven la tradición. Después de un picante y delicioso desayuno mexicano, nos acercamos al templo. En su interior palpitan los siglos, la influencia española sobre la religión y arquitectura, enriquecido todo con la mezcla indígena y las manos que pintaron motivos sencillos en las paredes, que en conjunto y a distancia nos permiten valorar muros con efecto de papel tapiz. Flores silvestres a los pies de la Virgen Dolorosa. Nativos con sus ropas de domingo sin perder el estilo regional. Todo aquí parece simple, pero tiene su dosis de complejidad por observar.

Resulta difícil partir, despedirse de la gente que atiende el hotel, que por días e instantes al ser todo tan personal e íntimo, se torna familiar, por eso cuesta decir adiós o hasta pronto a personas y emociones. Tendría ganas de vivir ahí, pero mucho me temo que la quietud y paz me rebasa. Somos desafortunados los que nos creemos con suerte de trabajar en grandes ciudades, contaminadas y ruidosas, modernas y frías. En estos pueblos no tienen acceso a la tecnología, pero les sobra calidad de vida.

Tere García Ahued.

viernes, 21 de marzo de 2008

Vía Crucis de servicios públicos



MARIAN ÁLVAREZ
La Provincia-Diario de Las Palmas 23 03 08

María de la Cruz nació en 1915, el próximo 3 de mayo cumplirá 93 años. Después de dar a luz a ocho hijos, de haber tenido una alimentación escasa en calcio, de pasarse casi toda la vida en malas posturas, atendiendo a las tierras y los animales, y la consagrada menopausia, entenderán que sus huesos no están para muchas verbenas. María ya tenía una prótesis de cadera que le colocaron hace diez años, y hace un mes tuvo la mala suerte de caerse y romperse el fémur. Ingresó en el servicio de Urgencias de uno de los grandes hospitales de Las Palmas de Gran Canaria la madrugada de un viernes. Pasaron más de 12 horas hasta que la acomodaron en una cama en planta. Y con sus casi 93 años y el fémur roto aguantó tres días hasta que la operaron, pero su particular vía crucis sólo acababa de empezar.

Son incomprensibles las contradicciones que se dan entre el propio personal sanitario. Mientras el médico sostenía que la paciente podía colocarse en cualquier postura que no fuera de pie, algún auxiliar sostenía que debía estar siempre en la misma postura y alguna enfermera discutía que podía ladearse sobre el fémur operado. Y es que el personal sanitario que atendía a María no sabía de qué la habían operado: para unos se trataba de una prótesis de cadera y para otros le habían puesto un clavo entre el fémur y la cadera. A ninguno se le ocurrió mirar el historial de la paciente hasta que uno de sus familiares se plantó y les dijo que ya estaba bien de tanto cachondeo, que María era una persona, no un mueble, y que decidieran de una vez cuál era el protocolo para su recuperación. Curiosamente nunca había en planta un celador que echara una mano para cambiar a María de postura, por lo que los familiares, antes de esperar horas a que uno apareciera, optaban por hacerlo ellos mismos, siguiendo las instrucciones de algún auxiliar. Más curioso era que la enfermera preguntara a las visitas si le había dado las medicinas a la paciente porque ella no se acordaba ni lo había apuntado. Dada su edad, y su escasa movilidad, la familia planteó la posibilidad de derivar a la paciente a un centro asistido hasta que mejorara su estado. El traumatólogo dejaba la decisión en manos del geriatra, éste en manos del asistente social y éste devolvía la pelota al traumatólogo. Al final, y después de mucho pelear y rogar, como si de un favor se tratara, María fue derivada a otro centro sanitario durante dos semanas hasta que mejorara su estado de salud.

Antonio tiene 63 años recién cumplidos. Hace más de un año comenzó a sufrir unos dolores insoportables en la espalda. Su médico de familia no encontró solución para su dolencia y lo derivó al especialista. Pasaron seis meses hasta que el traumatólogo lo recibió, en junio de 2007. El médico ordenó tres pruebas diagnósticas, dos se practicaron en el mes de octubre, y la tercera, una resonancia, en enero de 2008. Curiosamente las pruebas que se hicieron al paciente se perdieron por el camino y nadie sabía dónde se encontraban. La burocracia manda y después de pasar por un sinfín de departamentos Antonio tuvo que rellenar documentos para que alguien se pusiera a buscar las pruebas. Y aparecieron. Pero Antonio, y su dolor de espalda, tendrán que esperar al próximo mes de agosto para que el traumatólogo los reciba. Sólo habrán pasado 20 meses desde que comenzaran los dolores hasta que el médico pueda decirle qué tipo de dolencia sufre.

Lidia tiene 37 años y vive en Jinámar (Telde). Cuando en su centro de salud ha pedido cita con un ginecólogo le han dicho que no hay ese tipo de especialidad para los ciudadanos de esa zona, que no pueden derivarla a ningún servicio, ni en su municipio ni en el resto de la Isla. La última vez que Lidia preguntó le dijeron que estaba de enhorabuena, y que para 2009 ya podrían contar con un ginecólogo que las atendiera. Claudia tiene casi cuatro años, y estudia en un colegio público de la capital. El patio de la escuela está hecho de asfalto, el mismo que se usa para las carreteras, porque es más barato. Luce unas manos de pintura, pero no amortigua los golpes que se da la pequeña cuando, como todos los niños, corre y juega por el patio.

María es mi abuela, Antonio mi padre, Lidia mi hermana y Claudia mi sobrina. Y cuando hablo con ellos de estas cosas no encuentro argumentos para explicar que, pese a todo, son afortunados por vivir en el Primer Mundo. Me cuesta encontrar razones para defender los servicios públicos y explicarles que todo el dinero que pagan en impuestos, que han aportado durante años de sus exiguas nóminas, son fondos bien gestionados por la Administración para garantizar el bienestar de sus ciudadanos, la supuesta prioridad de un Estado democrático y sus gobiernos: central, autonómico y local. Lo más duro es, en cualquier caso, la impotencia que siento de no poder hacer nada por ellos.

miércoles, 19 de marzo de 2008

El Viernes Santo no se come carne



En Semana Santa no se puede comer carne. Sobre todo, el Viernes Santo. Así me enseñaron de pequeño. Siempre preguntaba por qué, cuál era el motivo. Algo que no podía entender. Ese día todos cambiaban y siguen cambiando la carne por el pescado. Tal que la gente compraba y sigue comprando cherne, un pescado que se conserva salado y que se usa mucho en Canarias, para hacer nuestra comida típica, el sancocho.


Recuerdo también hace muchísimo tiempo, con unos 25 años, estar comiendo con unos amigos en un restaurante de Tenerife un viernes de los tantos de Cuaresma. En la mesa de al lado se sentó el obispo de aquella isla y un grupo de personas. Como no se podía comer carne, comieron mariscos. Y en voz alta comentó el obispo la razón de aquel menú. Pregunté a mis amigos de qué penitencia se trataba pues los mariscos eran mucho más caros que la carne.

Y volviendo hacia atrás, como los niños son unos preguntones y el por qué siempre está en sus labios creo recordar la explicación que me dio mi abuela. No se come carne el Viernes Santo, me dijo ella, porque la carne es muy cara, es un artículo de lujo, ese día nos privamos de ella y comemos otra cosa más barata, y la diferencia va de limosna a los pobres. Encontré sentido a aquella explicación que, como siempre, expresaba la sabiduría popular de mi abuela, de quien tanto aprendí y que tanto nos enseñó a sus nietos.


Con el paso del tiempo la carne bajó de precio, y el pescado subió. Hoy la gente se pelea por conseguir cherne para el sancocho del Viernes Santo, y lo más barato que lo encuentra es a 12 euros, con lo cual compran otro pescado. ¿Por qué tanto lío, me pregunto? Si la razón era no darnos un lujo un día como Viernes Santo, lo más práctico, si queremos seguir siendo consecuentes con los razonamientos de fondo, es comer hoy carne y abstenernos de pecado. ¿No sería más penitencia cambiar una buena morcilla de Teror por un cherne o por la perca y la corvina que son los pescados que le siguen en precios?


Una vez mas hacemos de costumbres culturales, propias de un momento histórico, verdades fundamentales para toda la vida. Una vez más encontramos en todas las religiones normas y costumbres que no perteneciendo a lo esencial de las mismas, las constituimos en cosas fundamentales donde parece que, transgrediéndolas, violamos lo mas importante, que suele ser lo que sale del corazón –las buenas intenciones, los buenos sentimientos, los deseos limpios para los demás, la generosidad- y nos seguimos quedando con lo que entra por la boca, que no suele manchar el corazón de las personas, si acaso hace daño a un estómago débil.

lunes, 17 de marzo de 2008

Ilegales, ¿por qué?


ILEGALES , POR QUÉ?
Roberto Rodríguez
Septiembre/05.
Revisado en Abril, 2007.



Por qué me dicen que soy un ilegal?
Si tu y yo indígenas auténticos
nacimos en la patria del mundo.
En el hemisferio del oro,
donde mis ancestros
abrieron puertas al emigrante europeo,
al caucásico, al mongol, al sajón, al asiático,
al judío y a todos los errantes.
Por qué ilegal?
Si yo nací en tierra del zenzontle y del venado,
junto al mar, la ballena y la sirena,
en la misma morada de los árboles,
volcanes y ríos, donde ninguno es ilegal.
Por qué me llaman ilegal?
Si mi mundo es de colores,
mi raza pipiltolteca, maya, inca,
hermanas de los sioux y los mapaches del Norte,
y los mapuches del Sur,
y los pigmeos de lejanos continentes.
Por qué me llaman así?
Si no es ilegal, el color de mi piel,
quemada por los mismos rayos de Sol
que brillan en la Africa del Elefante,
de la foca, en la Patagonia.
Me niego serlo, y no soy ilegal,
porque soy el ciudadano más legal del mundo,
y mi única religión es el Amor,
y el amor jamás será ilegal,
y por último: Si soy de aquí, más que de allá,
y de allá más que de acá,
y seguirán siendo mías las noches de octubre
con luna y estrellas adonde quiera que vaya.
Yo no soy ilegal,
lo único ilegal que conozco es la violación a la paz,
mi libertad, y las heridas a mis sentimientos,
y al derecho innato y legal de vivir.
Lo único ilegal que conozco,
es la injusticia, y las guerras provocadasde las élites corruptas.
Esas sin son ilegales.

sábado, 15 de marzo de 2008

Pecados sociales



He leído deprisa y corriendo las declaraciones del Vaticano enumerando una serie de cuestiones sociales injustas que llama pecados. La verdad que lo visto por encima no me parece nada mal. Ya era hora de que se tuviera en cuenta que la injusticia, la corrupción, los desastres medio ambientales, la falta de responsabilidad al conducir y cosas similares sean cosas tenidas en cuenta por los cristianos o miembros de la Iglesia Católica en su comportamiento. Ya era hora de que se las denunciara.

Pienso dos cosas sencillas sin profundizar mucho en el tema y sin haberme leído todo el documento, que me llama la atención y habré de leer despacio:

La primera que es bueno que ese documento llegue a los Obispos españoles a fin de que se enteren de los criterios que hay que tener en cuenta también a la hora de votar. No solo cuestiones relacionadas con el sexo de las personas o la relación sexual, sino también cuestiones relacionadas con la libertad, la vida en todas sus manifestaciones, la fraternidad y la igualdad.

La segunda que tampoco me parece bien la ridiculización de los medios de comunicación social con respecto a este tema. Poco menos que diciendo que es para dar más trabajo a los curas que tenían los confesonarios vacíos. Me parece una gili idea, si esta palabra existe. Porque, por otra parte, estos pecados o lacras sociales a extirpar no es cuestión de ir a un confesonario, sino erradicarlos de la vida social, reconocer públicamente los fallos, realizar acciones sociales y políticas encaminadas a su cumplimiento y que los ciudadanos normales y corrientes exijamos su cumplimiento.

Volveremos sobre el tema.

jueves, 13 de marzo de 2008

Bondades humanas


Algunos amigos me han comentado que,
aun cuando el amor y la compasión son buenos y maravillosos,
no son, en realidad, dema­siado importantes.


Aseguran que nuestro mundo no es un lugar donde estas virtudes ejerzan mucha influencia o poder
y sostie­nen que la ira y el odio están tan enraizados en la naturaleza hu­mana que la humanidad estará siempre dominada por ellos.


No comparto esta opinión.
Los seres humanos llevamos existiendo en nuestra forma ac­tual desde hace más de cien mil años.

Estoy convencido de que si durante todo ese tiempo la mente humana hubiese estado gober­nada principalmente por la ira y el odio,
la población habría dis­minuido.

Sin embargo, hoy en día, a pesar de todas las guerras, vemos que la población humana es más numerosa que nunca,
lo cual es un claro indicio de que, si bien la ira y la violencia están presentes en el mundo,
el amor y la compasión predominan en él.

Esa es la razón de que lo que llamamos «noticias» estén com­puestas en su mayor parte por hechos desagradables o trágicos;
los actos compasivos son tan habituales en la vida cotidiana que los damos por sentado y, en consecuencia, no los tenemos en cuenta.
Si observamos la naturaleza humana, comprobamos que es más bondadosa que agresiva.

Por ejemplo, si examinamos los animales, reparamos en que los animales de naturaleza más pacífica tienen una estructura corporal
que armoniza con esa naturaleza, mien­tras que los animales predadores poseen una constitución confor­me a su forma de ser.

Si comparamos el tigre y el ciervo vemos que hay diferencias notables en sus respectivas estructuras físicas;
y si a continuación comparamos nuestra estructura corporal con la de ellos,
vemos que estamos más cerca de los ciervos o de los conejos que de los tigres.


¿Acaso nuestros dientes no se parecen más a los de un conejo que a los de un tigre?


Nuestras uñas son otro buen ejemplo de ello.
Dudo que de un arañazo pudieran lastimar a una rata.

Es evidente que gracias a nuestra inteligencia humana somos capaces de inventar y utilizar
todo tipo de mecanismos y artilugios para conseguir cosas que de otro modo nos estarían vedadas,
pero ciñéndonos a la constitución física pertenecemos a la categoría de los animales dóciles.


Al fin y al cabo somos animales sociales, y sin la amistad y la sonrisa de nuestros congéneres
nuestras vidas serían desgraciadas y nuestra soledad abrumadora.


Esta interde­pendencia humana es una ley fundamental de la naturaleza,
lo que equivale a decir que, según la ley natural, dependemos de los demás para subsistir.


Dalai Lama - Con el corazón abierto

miércoles, 12 de marzo de 2008

¿Reforma de la ley penal del menor?





COMUNICADO DE JUECES PARA LA DEMOCRACIA SOBRE LA PROPUESTA DE REFORMA DE LA LEY PENAL DEL MENOR

La propuesta del Partido Popular de rebajar la edad de responsabilidad penal de los menores a los 12 años nos parece un error que se fundamenta en la desconfianza hacia la respuesta que el Estado de Derecho está dando de forma normalizada a las situaciones de conflicto social y se enmarca en un planteamiento populista que supuestamente pretende resolver conflictos complejos con el derecho penal.

No se niega que con los menores de 14 años que cometen un delito haya que intervenir, pero esa intervención no debe ser penal, sino educativa y social. Esta intervención no penal tiene posibilidades educativas y efectos más beneficiosos a medio plazo, tanto para el menor como socialmente. Hay ámbitos en los que el castigo penal no puede entrar, como son los casos de los niños o los enfermos mentales, pues el propio concepto de civilización y de progreso ético y moral impide aplicar una sanción penal a quienes por ser seres humanos en formación o tener gravemente alteradas sus facultades precisan intervención educativa o sanitaria.


La propuesta se fundamenta en el denominado “populismo punitivo”, planteamiento alejado del intento de resolver los problemas de la delincuencia con rigor, convencido de que las políticas de mano dura son un caladero de votos en barrios periféricos donde existe un tejido social deteriorado. Plantear un debate sobre algo tan importante como el límite de la edad penal en una campaña electoral aleja la posibilidad de tratar el tema con rigor y serenidad y puede suponer que empiece una especie de puja sobre quién es más punitivo, tan perjudicial para la intervención en menores y jóvenes.

Tampoco la medida va avalada por ningún estudio empírico que revele problemas importantes de inseguridad ciudadana causados por niños de 12 o 13 años, sino que lo que demuestran estos estudios es precisamente lo contrario. Los informes de especialistas encargados por el Consejo General del Poder Judicial apuntan en sentido contrario y evidencian que la delincuencia violenta de los menores de 14 años es muy escasa en relación con los menores de 14 a 18, que es la franja de edad actual.

La intervención con menores y jóvenes precisa de un debate sereno en el que tengan cabida todas las variables de este fenómeno tan complejo, y desde luego más medios por parte de las Comunidades Autónomas, pues es precisamente la actual falta de medios lo que está impidiendo el cumplimiento de los objetivos legales y a veces confunde a la ciudadanía sobre una falsa ineficacia del contenido educativo y socializador de las leyes. El modelo de justicia de menores requiere mejoras pero no precisamente en el sentido apuntado de rebajar la edad penal.

Finalmente decir que la propuesta nos aleja de los principios de la Convención de de Derechos del Niño de 20 de noviembre de 1989, ratificada por España, y que apuesta por las medidas educativas en la intervención con menores.

Febrero 2008.


Secretariado de Jueces para la Democracia
info@juecesdemocracia.es
http://www.juecesdemocracia.es

lunes, 10 de marzo de 2008

Dolor

DOLOR...
(Hay cosas en la vida que nosmarcan el alma para siempre...)
Para escalar la cumbre donde estaba mi sueño,
como Moisés oyendo la Voz del Sinaí,
mi corazón ardiente lo puse a flor de pecho
y abriendo las dos palmas de mis manos partí.


Llevaba en mis alforjas por pan: Las Ilusiones;
por guía: La Esperanza;
por báculo: La Fe;
y en las abruptas rocas de las altas montañas
habría de hallar el agua para calmar mi sed.

Para escalar la cumbre donde estaba mi sueño,
mis plantas lastimaron los riscos que pisé,
se abrieron hondas llagas, en mis abiertas palmas,
y después... No recuerdo... Sólo se que rodé.

Fue tan brutal el golpe,
que me encontré confuso, absorto el infinito,
sin saber contemplé,
mis dos abiertas manos eran crispados puños,
y el corazón deshecho, dentro mi pecho hallé.

AUDROC

jueves, 6 de marzo de 2008

El valor de la mujer


Un llanto y ¡nació una niña!.

El padre soñaba con ese varón ,que perpetuaríasu apellido, y sería el orgullo de la familia.Se incomodó, y se alejó por días de su hogar.

-¡Papá! fue el primer nombre que balbuceó.Y empezó sus primeros pasos y así vacilante al caminar,buscaba las pantuflas cuando cansado del trabajo llegaba su padre.

Y fue creciendo en tamaño y en valores, preocupada por cada lección, por cada tarea del hogar, por estar allí cercade su madre, por oír los consejos de su padre.Fue a la Universidad, y se preparó para enfrentar los avataresde la vida.

¡Ya era una mujer! y emprendió la lucha que toda mujer a pesarde haber ganado tantas batallas, todavía continúa para ganar la guerra.

Un día su padre sentado junto a ella, con su pelo pintando con hilos de plata, su mirada cansada y su cuerpo un poco encorvado, recuerda que su llegada no significó para él una alegría.Pero ahora esa mujer, que trasmite nobleza, que da alegría a su vida, que comprende sus cambios, vale tanto para él. Fue la mejor lección que la vida pudo darle y comprendió el hermosopapel que ella representa.En su afán de prolongar su apellido se había olvidado que por unamujer llegó a este mundo, por una mujer pudo consumar su paternidady ahora, una mujer le tiende la mano en sus horas de otoño.

Si aun no has comprendido el valor de la mujer, búscalo en tu corazón y allí junto a tus mejores sueños la encontrarás: arrullándote, compartiendo el amor, bendiciendo tu nombre.
Nelly Guerrero

miércoles, 5 de marzo de 2008

Héroes reales, insuficientes oportunidades y esperanzas



Héroes reales, insuficientes oportunidades y esperanzas.

Sin ninguna autoridad o conocimiento documentado, me atrevo a dar mi opinión sobre las elecciones de gobiernos. En México no estamos en época electoral, pero sí puedo citar los ejemplos de España y Estados Unidos por llamarme la atención al escuchar los noticieros. En ambos países el tema migratorio es importante y cada candidato ofrece distintas cosas. No citaré ahora ningún aspecto de los partidos políticos que referente al tema, promueven derechos o combaten con injusticia a los inmigrantes que cruzan sus fronteras. Simplemente lo veo desde mi punto de vista, como mujer que en su comunidad conoce casos de familias separadas por ese sueño americano.


Creemos que basta sentir el valor e impulso para que los migrantes mexicanos o latinos, decidan emprender la dramática travesía que los coloca si tienen suerte de no ser descubiertos sin documentos y pasaporte en los Estados Unidos. No les es fácil al principio, pero una vez que el salario les permite enviar dólares a sus familias, suponemos que la felicidad y tranquilidad les envuelve de " verde " como esos billetes en los que tanto sudor tienen que empeñar. Y digo suponemos, porque pensamos que alcanzado el objetivo, todo ha valido la pena y omitimos el dolor, el sacrificio, la discriminación y todo aquello por lo que pasan y de lo que jamás estarán a salvo. Aunque se unan en comunidades y las nombren con respecto a sus países de origen, siempre llevarán ese sello: " ilegales ", como si las personas no fueran todas legales.

No sé de quién sea la responsabilidad, si de los países que no ofrecen oportunidades, o de aquellos que quieren combatir la inmigración con medidas que omiten los derechos humanos de los mismos. Y esto no solo a los que ya residían hasta deportarlos, sino de los que son capturados en las fronteras tratados sin el respeto que merecen. Quisiera ahora ofrecer soluciones, simples granos de arena que aportaran algo, pero en estos temas nadie descubre el hilo negro, son parte de las inquietudes nacionales, y nunca las campañas y candidatos que se vuelven gobierno, toman las medidas justas para encontrar mediante acuerdos, respuestas que dejen satisfecha a una sociedad implicada directa o indirectamente.

Se tendrían que dejar de dirigir discursos ante auditorios, sonorizando a través de potentes equipos sus voces ofreciendo medidas, soluciones. Habría que quitarse las ropas bien planchadas y dejar al estómago rugir de hambre, solo para sentir lo que quema el sol en la piel del otro. Tendrían que escurrirse en los zapatos rotos, surcirse el alma y hacer rendir un trozo de pan en una familia de cinco personas. Qué difícil enfermar y aliviarse con remedios caseros o sentir el cuerpo ardiendo en fiebre y salir a la calle a encontrar trabajo, para volver a casa decepcionado porque los gobernantes en sus países les fallan, porque las oportunidades son insuficientes y tienen que disfrazarse de héroes de comics cruzando fronteras terrestres, marítimas, sorteando obstáculos, sobreviviendo al clima, al hambre, al sueño y a su propio miedo.

Por esta razón, cuando veo a candidatos subidos en altos foros, aclamados como los héroes que el país esperaba, me pregunto ¿quienes serán en verdad los auténticos héroes, los de arriba o los de abajo ?.

Tere García Ahued.

domingo, 2 de marzo de 2008

Un código ético para los políticos, por favor



No lo puedo soportar. Va más allá de mis entendederas. No entiendo nada. Creo que vivimos en otro mundo, no en el mundo otro, no en el otro mundo es posible. Más bien en el mundo imposible que muchos aborrecemos, y no quisiéramos llegar más nunca. No soporto la mentira, la injusticia, la villanía.

Y creo que a cosas de estas estamos llegando en la campaña preelectoral. Todos los días cuando uno lee los titulares de la prensa se queda pasmado, incrédulo, sin dar crédito a lo que se lee. Ahora resulta que según dice Soria, el jefe del Partido Popular en las ocho islas canarias, “los socialistas dan aliento a las mafias de la inmigración”. O sea quien le escucha puede pensar que se reparten las ganancias del dinero que ganan los que trafican con las vidas de los seres humanos. Pero ¿a quien se le ocurre decir semejante barbaridad? Ayer fue que los niños desaparecen por culpa de Zapatero que no pone guardias en todos los parques. ¿Se lo podrá creer alguien? ¿Habrá gente que no se dé cuenta que está lanzando bulos para ganar votos?

No soy partidario de los mensajes que sobre la inmigración lanza el Partido Popular. Tampoco de la política que ha seguido en torno a este tema, y de la que anuncia. No me gustan los mensajes racistoides que lanza. Me disgustaba cuando en otro tiempo, gobernado por ellos, drogaban a los inmigrantes y los metían en aviones de vuelta a sus países u otros que no eran los suyos, y lo justificaban diciendo “teníamos un problema y lo hemos resuelto”. Y, desde las plataformas donde en aquel momento tenía oportunidades, denuncié esas situaciones, tanto en forma colectiva como personal. Pero nunca se me ocurrió pensar, expresarme, decir que el Partido Popular estaba en alianza con las mafias, dado que, a pesar de sus políticas intransigentes, seguían llegando inmigrantes, pateras y entraban por las fronteras legalmente, todo igual como ahora. Ni se me ocurrió ni se me ocurre pensar en eso.

Me parece un disparate lo que se dice en esta materia. No es justo ganar votos con mentiras, ya no solo hablando mal de terceros, sino con mentiras. Como lo de “papeles para todos” que se sigue repitiendo. Pienso que una de las tareas de la próxima asamblea legislativa debería ser promulgar un Código Etico para los políticos, sobre todo en las campañas electorales, de manera que todo el que dijera mentiras totalmente demostrables, como éstas que se están diciendo, fueran incluso penalizados quitándole por lo menos cien mil votos de los que consiguieran. Algo habrá que hacer, porque qué se puede esperar del gobierno y servicio al pueblo por parte de aquellos que lo consiguen mintiendo descaradamente. Es injusto. Me indigna. Vale más el silencio, y callarse, si no se está de acuerdo con la política del otro y no se tienen argumentos fiables. Y otra cosa que debería entrar en ese código ético es que los que se presenten a las elecciones firmen un contrato o documento donde se comprometan a respetar los derechos y libertades fundamentales de los seres humanos recogidos en la famosa Declaración Universal que todos conocemos. Son dos sugerencias nada más. Pero creo sinceramente que hace falta algo de eso.